1. Menos desperdicio, más valor
Cada gota de agua de drenaje contiene aún nutrientes valiosos; ¿por qué desaprovecharlos? Al cerrar el ciclo del agua y reutilizar de forma segura el agua de drenaje, reduce considerablemente la necesidad de agua dulce y fertilizantes. Este enfoque no solo favorece al medio ambiente, sino que además mejora la rentabilidad. Por ejemplo, los productores de tomate neerlandeses ahorran hasta EUR 4000 por hectárea al año al aplicar estas estrategias.
Consejo: sistemas como Priva Vialux M-Line hacen posible la reutilización segura del agua reciclada.
2. Afrontar mejor la sequía
El cambio climático está generando sequías más prolongadas y frecuentes. Al reciclar el agua de drenaje, asegura un suministro hídrico más constante para sus cultivos, independientemente de las condiciones climáticas.
3. Cumplimiento de las normativas de emisiones
Las leyes ambientales en Europa se están volviendo cada vez más exigentes. Al cerrar el ciclo del agua, reduce significativamente las emisiones de nutrientes hacia el medio ambiente, facilitando el cumplimiento de la normativa y protegiendo el futuro de su empresa.
4. Control total de la estrategias de gestión del agua
Las soluciones integradas como Priva nutri-line y Priva Connext le permiten controlar con exactitud la cantidad, calidad y composición del agua de riego. Esto hace posible equilibrar de forma automática el agua reciclada y dulce, mejorando así las condiciones en la zona radicular en cada fase del crecimiento.
5. Máximo rendimiento
Al ajustar el riego a las necesidades de sus cultivos en cada momento, disminuye el desperdicio y promueve un crecimiento más fuerte y uniforme. Mediante el uso de datos de la zona radicular, los productores pueden afinar sus estrategias de riego durante toda la temporada. Esto se traduce en cultivos más sanos y rendimientos más altos.
Consejo: puede poner esto en práctica con sistemas como Priva PIM en combinación con Priva Connext.